Los Materiales Peligroso se consideran «peligrosos» porque: Pueden dañar las instalaciones si explotan o causan incendios, la salud de las personas produciendo quemaduras, intoxicaciones o enfermedades, al medio ambiente si hay vertidos que puedan contaminar las aguas, el suelo o la atmósfera.
Algunos productos como la lejía, el alcohol etílico, el alcohol de quemar, el aguarrás, el amoniaco, las pinturas, el salfumán, los quitamanchas, los combustibles, los insecticidas o los pegamentos son productos químicos que se utilizan en el trabajo y/o en nuestras casas, y que en su mayoría son peligrosos.
Hay muchos tipos diferentes de materiales peligrosos, como:
· Productos químicos, como algunos que se utilizan para la limpieza
· Fármacos, como los de quimioterapia para tratar el cáncer
· Material radiactivo que se utiliza para radiografías o tratamientos de radiación
· Tejido humano o animal, sangre u otras sustancias del organismo que pueden portar microbios nocivos
· Gases que se utilizan para dormir a los pacientes durante una cirugía
Debido a la gran variedad de materiales peligroso se debe informar al usuario sobre los peligros de las sustancias y mezclas con las etiqueta de seguridad y la ficha de datos de seguridad.
El mejor método para solucionar una emergencia con Materiales Peligrosos es ir un paso delante de los hechos, es decir, tener preparada y entrenada una rápida y coordinada. El primer paso para lograr la prevención y una eficaz intervención, es el reconocimiento del tipo y clase de riesgo presente en el lugar, ello otorga la posibilidad de planificar correctamente cual será la intervención más adecuada y oportuna en ejecutar.

