Los programas internos de protección civil surgen en base a la necesidad de poder minimizar los daños causados por los desastres que ocurren en nuestras ciudades.
México es una de los países que puede sufrir este tipo de catástrofes por un terremoto. Esto nos orilla mantenernos a la vanguardia en cuanto a programas internos de protección civil a nivel mundial procurando brindar el mejor servicio en el campo o incuso durante los cursos para los programas internos de protección civil. En una situación de emergencia, el brindar servicios de primeros auxilios a la población debe constituirse en una función prioritaria de la protección civil, por lo que deben actuar en forma conjunta y ordenada. Los organismos que la regulan suelen, además, definir una forma de participación ciudadana, siendo conveniente la correcta formación de los integrantes durante programas internos de protección civil preparando a un grupo de personas para actuar ante catástrofes, en apoyo a los servicios de asalariados y que sirvan como responsables en la organización de la ayuda ciudadana.
Existen 3 etapas para minimizar los daños ante un desastre: Etapa de prevención, de emergencia (durante el desastre) y de reconstrucción donde principalmente se enfocan en servicios básicos como abastecimiento de agua potable, abastecimiento de energía eléctrica, telecomunicaciones, recolección y tratamiento de las aguas servidas.